Ya que la semana pasada hablamos de la formación del colocador, esta semana queremos seguir con un tema relacionado: el toque de dedos. Sin embargo, esta vez vamos a hablar desde el punto de vista de la iniciación a esta técnica con cualquier jugador, y no sólo con el colocador.
Como la mayoría sabréis, sobre todo si habéis trabajado en la base, es muy frecuente que aquellos que están iniciándose en el toque de dedos cometan ciertos errores como pueden ser el dirigir el pulgar hacia arriba, no utilizar todos los dedos o mantener las muñecas rígidas durante el contacto. Son fallos frecuentes que debemos tratar de ir corrigiendo a través del entrenamiento.
Una buena manera de introducir esta técnica elemental, es comenzar con toques de dedos contra el suelo. Seguro que muchos ya habéis visto este ejercicio alguna vez, donde los jugadores realizan botes contra el suelo con ambas manos tratando de reproducir la técnica de dedos. De esta manera sencilla, se elimina el “miedo” a que el balón nos golpee en la cara (que muchas veces es el que ocasiona la elevación del pulgar hacia arriba o la excesiva tensión de muñecas) y se comienza a comprender el toque. Además, tiene otra ventaja empezar de esta manera: no es necesario mantener la posición de brazos elevados y cabeza mirando hacia el techo que resulta cansada si se repite durante mucho tiempo.
Este ejercicio, suele tener una evolución bastante sencilla en la que los jugadores se desplazan por el campo realizando toques contra el suelo, de manera que realizan un alto número de repeticiones de forma individual. Por lo general, a nosotros nos gusta que los deportistas se desplacen siguiendo líneas en el campo para que tengan un objetivo y vayan realizando cambios de dirección. Asimismo, también solemos introducir diferentes tipos de desplazamientos (hacia delante, hacia atrás, hacia los lados, etc.) y diferentes alturas en el toque (pasando de posición agachada a elevada o al revés). De esta forma, incorporamos variantes al mismo ejercicios que nos permiten mantenerlo durante más tiempo.
Sin embargo, este ejercicio resulta muy básico y sólo podremos utilizarlo mientras el deportista esté en fase de iniciación. Por esta razón, nosotros hemos tratado de llevarlo un paso más allá para sacarle mejor partido. Para ello, lo hemos convertido en un ejercicio de calentamiento. ¿Cómo? Pues de manera muy sencilla:
Seguro que en alguna ocasión hemos visto, ya sea a nuestro equipo o a otro, incluso de otro deporte, haciendo un ejercicio en el que los jugadores se sitúan frente al entrenador y realizan desplazamientos en las direcciones que les indica éste. En deportes como el baloncesto, es muy frecuente realizarlo con balón (incluso con dos balones al mismo tiempo), botando al tiempo que nos desplazamos para mejorar el dominio de la pelota. Generalmente se trata de un ejercicio bastante intenso donde se trabaja la velocidad de reacción y los desplazamientos.
Así que nosotros nos preguntamos, ¿por qué no aplicamos esta idea al voleibol? Por esta razón comenzamos, con los equipos más jóvenes, a realizar este ejercicio de toque de dedos contra el suelo, pero incorporando desplazamientos dirigidos por el entrenador. Y el resultado ha sido mejor de lo esperado, hasta el punto que lo hemos evolucionado hasta deportistas sub 17 sin que haya perdido intensidad o haya resultado excesivamente sencillo.
Pero ¿por qué quedarse ahí? Mientras que con los grupos de menor edad realizar los desplazamientos tocando contra el suelo ya tiene cierta complejidad, para aquellos con un poco más de experiencia, puede ser relativamente sencillo. Por esta razón, también podemos evolucionar hacia el mismo ejercicio realizando toques de dedos normales. La ventaja de este ejercicio es que además de trabajar la técnica y el control del balón, también estaremos desarrollando la visión periférica de los jugadores, que deberán mantener la atención, no sólo en la pelota, sino también en las indicaciones del entrenador y en la posición y movimientos de los compañeros. Aquí tenéis la primera prueba con nuestro nuevo equipo… Todavía les hace falta un poco (o un mucho) de práctica!
Nosotros solemos decir que la innovación es una parte fundamental de la faceta de entrenadores. Reproducir ejercicios es una opción totalmente válida, pero crear nuevas tareas o evolucionar algunas antiguas, puede ofrecer grandes resultados.
Os invitamos a probar este ejercicio y a que comentéis vuestros resultados con nosotros. Y por si os interesa este tema, aquí tenéis también el enlace a otra entrada anterior en la que os proponemos un material para mejorar la técnica de dedos: Corrección del toque dedos en iniciación